Durante una reciente entrevista para la revista GQ, la estrella de la película “Twilight,” Kristen Stewart compartió su frustración por no haber terminado la escuela.
Kristen comenzó a actuar cuando tenía ocho años y balancear el trabajo mientras continuaba asistiendo a la escuela fue una tarea muy difícil y finalmente decidió renunciar a su educación en el séptimo grado cuando era una adolescente.
Pero ella afirma que tuvo que continuar con su educación en casa porque sus maestros se rehusaron a ayudarla cuando se encontraba en alguna locación y no podía asistir a la escuela.
Ella dijo, “La escuela se volvió muy incomoda. Me sentía un poco cohibida con mis compañeros por la actuación, pero también mis maestros se convirtieron en un problema. No querían el trabajo extra o preparar tareas para que pudiera mantenerme al día mientras me encontraba fuera. Me reprobaron. Mis maestros me reprobaron. No uno, pero todos. A veces me da vergüenza de cierta manera, por lo que hago. Me siento avergonzada porque tenía tantas ambiciones cuando era más joven. Nunca imagine que tendría una razón para no ir a la escuela. Pero luego sucedió esto.”
Aunque la comprendemos. Fue ella quien decidió ser una actriz. Sus maestros no están obligados a preparar lecciones especiales para una niña que ha decidido junto con su padres que actuar es más importante que una educación.
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